Cómo meditar para la productividad
Es común que tengamos días donde pareciera que todo nos sale mal, que no podemos enfocarnos en nuestras tareas y que definitivamente no somos productivos. En momentos así, la meditación puede ofrecernos la ayuda que necesitamos para mejorar nuestra productividad. Si aún no sabes cómo meditar o si no te has animado a hacerlo, en este artículo te explicamos los beneficios que la meditación puede brindarte en cuanto a productividad se refiere.
Lo que debes saber sobre la meditación
La meditación es un método probado para reducir el estrés y la ansiedad, al tiempo que mejora la concentración y la claridad mental. Según la Asociación Americana de Psicología, la meditación es una actividad que nos permite entrenar la mente para enfocarnos en el presente, aumentar estados emocionales como la felicidad y, como consecuencia, mejorar nuestra salud mental.
Beneficios de la meditación para la productividad
Cuando hablamos de productividad, inmediatamente pensamos en la cantidad de trabajo que podemos hacer en un período de tiempo determinado. Pero, ¿cómo puede la meditación ayudarnos a mejorar nuestra tasa de productividad? Aquí te presentamos algunas formas en las que esta práctica puede ayudar a tu bienestar emocional y, por ende, a tu rendimiento laboral.
- Mejora el enfoque y la atención: Al meditar, entrenamos nuestra mente para enfocarnos en el momento presente, despejando así cualquier distracción que pueda interrumpir nuestra concentración durante nuestras tareas diarias.
- Reducción del estrés: La meditación calma nuestra mente, permitiéndonos controlar nuestros niveles de estrés y ansiedad. Un cuerpo y una mente relajados pueden trabajar mejor ante retos que impliquen más esfuerzo o concentración mental.
- Aumento de la creatividad: Las personas que meditan regularmente pueden tener una mayor actividad en la parte del cerebro responsable de la creatividad. Esto se traduce en la capacidad de pensar más fuera de la caja con resultados innovadores y creativos.
- Incremento de la empatía: Al ser capaces de concentrarnos en el momento presente, podemos prestar atención adecuada en las necesidades y sentimientos de nuestros colegas, clientes y amigos. La empatía mejora la comprensión y la comunicación interpersonal, lo que puede llevar a una mejor colaboración y a un ambiente de trabajo más amigable.
Pasos básicos para meditar
La meditación es muy adaptable y flexible a las necesidades de cada persona. Aquí compartimos algunas técnicas para que puedas empezar a meditar en casa.
- Encuentra un lugar tranquilo: Busca un lugar donde puedas estar tranquilo por al menos unos minutos sin interrupciones ni ruidos.
- Escoge una técnica de meditación: Hay muchas maneras de meditar, desde concentrarse en la respiración, la visualización, pronunciaciones de mantras, entre otras. Escoge la técnica que mejor se adapte a tus necesidades y habilidades.
- Sentado con el respaldo recto: Esto ayuda a mantener la concentración mientras se medita y evita la tensión en la espalda durante el proceso.
- Concentración en la respiración: Enfócate en la entrada y salida de la respiración, sintiendo el aire en las fosas nasales y el movimiento del abdomen.
- Concentra tu mente: Si tu mente se distrae, regresa lentamente a concentrarte en la respiración de manera suave y sutil. No te exijas ni te culpes si tu mente se distrae o viaja.
- Comienza con cinco minutos: Empieza con periodos cortos, de cuatro o cinco minutos e incrementa gradualmente la duración de la meditación.
En conclusión
En resumen, la meditación es una excelente forma de mejorar tu productividad. A través de esta práctica, puedes concentrarte mejor, reducir el estrés y aumentar la creatividad y empatía. Finalmente, el éxito profesional y personal se basa en el equilibrio y la salud mental y emocional, por lo que dedicar un par de minutos al día para meditar puede ser una herramienta valiosa para incrementar tu bienestar integral.